Si te hace bien, ven.
(Francisco de Asis)
Con el postulantado comienza la formación real de la Orden. Para ello, la joven deja su trabajo (temporalmente) y su apartamento y se muda a la casa madre.
En los siguientes seis meses vive y trabaja en la comunidad de hermanas y puede ver si quiere continuar en este camino.
Luego sigue el noviciado.