Hace un cuarto de siglo que la hermana Diana Oré y la hermana Lidvina Ramírez se unieron a nuestra comunidad en Lima. Las dos hermanas peruanas renovaron su promesa en una misa solemne en el círculo de las hermanas. Con una canción de bendición éstas felicitaron a las jubiladas, que ellas mismas tienen gran talento músical. Después, en el salón cariñosamente decorado, no sólo había torta, sino un delicioso menú peruano. La foto de grupo obligatoria fue tomada frente a la capilla de nuestra casa de retiro en Cieneguilla.
Al día siguiente la Hermana Karina hizo su primera profesión también en esta capilla . En Perú las hermanas reciben el hábito religioso y el velo negro para este importante paso en nuestra formación religiosa. Esto fue entregado a la Hna. Karina por la Superiora Regional, Hna. Fanny Terán, junto con el Libro de la Regla y las Constituciones de la Congregación. Después de un ratito para cambiarse, la … hermana entró de nuevo en la capilla y puso en manos de la Hermana Fanny la promesa de orientar su vida al Evangelio de Jesucristo, de vivir en castidad célibe, pobreza y obediencia --- según la Regla de la Tercera Orden Regular de San Francisco y las Constituciones de las Hermanas Franciscanas. Es un momento conmovedor para todos, ya que la fiesta de las dos hermanas que hicieron esta promesa hace 25 años es sólo hace un día. Un gran número de hermanas se reunieron para esta ocasión, y aquí también, las hermanas decoraron la sala en fina armonía con la joven hermana.
Si te hace bien, ven.
(Francisco de Asis)